Reflexión Ciudadana en San Luis Potosí

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 Hacia un nuevo régimen de representación

 

Editorial  http://www.reflexionciudadana.mx 

Nadie lo esperaba hasta hace unos cuantos meses. Todo mundo seguía viendo a los partidos y sus candidatos como únicas opciones para ejercer su derecho al voto. En la mente de muchas personas rondaba el fantasma de cuál o cuáles serían los candidatos “menos peores”, o si de plano mejor anularían su voto o se abstendrían. De pronto, desde las organizaciones de la sociedad civil comenzó a correrse la voz de que existe una alternativa distinta, incluso a la de los candidatos independientes registrados -sólo tres en todo el estado debido a los complejos requisitos que impusieron los diputados y el Consejo Estatal Electoral para aprovechar esa figura-: la de los Candidatos No Registrados, considerados en la Constitución y en la ley electoral del estado y para los que existe un recuadro en la boleta electoral.

Y comenzaron a surgir los candidatos para esta opción diferente. Y sus nombres se difundieron con rapidez en las redes sociales: Edgardo Rubín de Celis para gobernador del estado, Cirilo Juárez Rodríguez para alcalde de San Luis Potosí, Adrián René Contreras para diputado local por el sexto distrito, Gerardo Martínez Gaviño para legislador local por el séptimo distrito, y Carlos Alberto López Flores para diputado por el octavo distrito de San Luis Potosí. Cinco ciudadanos que, hastiados de los partidos y sabedores de que la población en general también lo está y de que espera un cambio profundo y verdadero, tuvieron el valor civil de postularse como Candidatos No Registrados, sin estructura, clientela, recursos públicos ni acceso a los medios de comunicación tradicionales -prensa, radio y televisión- como sí los tienen los aspirante emanados de los partidos políticos.

Hay quienes afirman que estos ciudadanos no tienen posibilidad alguna de competir contra quienes aparentemente lo tienen todo, excepto lo que más necesita la sociedad de quienes puedan representarla: valores, principios, dignidad, honestidad, solidaridad y un auténtico compromiso con la ciudadanía. Quizá tengan razón porque ha sido muy poco el tiempo y los recursos que han tenido para promoverse y la autoridad electoral ha faltado a su responsabilidad de promover este tipo de candidaturas, que son absolutamente legales y legitimas, pero lo que realmente están haciendo estos ciudadanos es empezar a construir el camino de un nuevo régimen electoral y de representación que no descanse en políticos, candidatos y partidos corruptos y en autoridades electorales cómplices.

La figura de Candidato No Registrado es realmente la única opción que tienen los ciudadanos para combatir los excesos históricos de la clase política y hacer a los partidos, o que cambien radicalmente y asuman su responsabilidad de luchar por los intereses y necesidades de la comunidad, o que desaparezcan y que los ciudadanos nos inventemos otra forma, institucional o no, de elegir a nuestros representantes.

Si aceptamos que el cambio profundo que requiere nuestro municipio, el estado y el país para alcanzar una democracia basada en la justicia, la igualdad y la legalidad, no se puede dar de un día para otro, y que es parte de un proceso de largo aliento, no es relevante si en la elección del próximo 7 de junio no obtienen la victoria los Candidatos No Registrados – aunque también se han dado sorpresas como la del doctor Salvador Nava en San Luis Potosí en 1958, y la de María del Rosario Elizondo en Jiménez, Tamaulipas en 1998, quien ganó la alcaldía de ese municipio- pues de lo que se trata es de seguir promoviendo y alentando la participación de candidatos ajenos a los partidos y fuera de las reglas amañadas de los órganos electorales para que, como lo hicieron en otro tiempo el doctor Nava y María del Rosario Elizondo, cada vez más ciudadanos comprometidos con la sociedad ganen elecciones en 2018, luego en 2021 y en cuantas elecciones sea necesario hasta que la clase dirigente y los partidos entiendan que, o cambian de a de veras, o la gente común pero comprometida con la población y con su entorno será la que gobierne.

Por lo pronto tenemos cinco nuevas opciones para decirle a los partidos que ya no les creemos ni queremos votar por sus candidatos. Pero ellos no tienen que ser los únicos. Cualquier persona bien intencionada puede participar como Candidato No Registrado. Tú mismo, tu papá, tu hijo o hija, tu esposo o esposa. Solo hay que atender algunos requisitos que se deben cubrir a la hora de emitir el voto y que puedes consultar en esta misma edición.

Empecemos el camino del cambio votando este 7 de junio por Candidatos No Registrados.

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